sábado, 21 de julio de 2012

Seguridad pública

Sirvan estas líneas para agradecer el magnífico trabajo de las instituciones policiacas de nuestro bendito país. La inseguridad se ha convertido en cosa del pasado y podemos salir a la calle tranquilamente, sin correr ningún riesgo.

Hemos tenido grandes avances en materia de seguridad. Me sorprende que no se hayan implementado antes. Creo que la mayor y más importante estrategia, fue el ingreso y capacitación de un ser incorruptible a las filas de los cuerpos policiacos. Me refiero a una figura que llevaba todo mi respeto y admiración: Los Puercops.

Así es. Los Puercops son lo más avanzado en técnicas de condicionamiento operante y reestructuración cognitiva. Es la ciencia psicológica trabajando en beneficio de la población. Su nombre deriva de dos de sus principales características: Puercos entrenados y policía, del término en inglés Cop

Estos nuevos animales entrenados resultan inmunes al soborno y las transas. Representan una fuerza superior de ataque, detección y prevención de delito. Se pensaba que eran un mito pero recientes investigaciones nos llevaron a la confirmación de su existencia.

Baste mencionar dos hechos ocurridos recientemente:

Caso A.
Noche en la ciudad, reunión de adolescentes para un concierto de la escandalosa música Rock. Los asistentes se encontraban afuera del recinto, esto levantó las primeras sospechas hacia sus actividades. Seguramente estaban consumiendo bebidas alcohólicas y drogas. 

Para evitar ensuciar la imagen de urbanidad y progreso, un grupo de Puercops llegó al evento. Debido al uso de sustancias, era poco probable que los jóvenes entendieran razones, así que se procedió a la intimidación. Cortando cartucho y mostrando sus rifles de asalto, los Puercops conminaron a los delincuentes a ingresar al salón, reducir el volumen y mantener el orden y la tranquilidad. 

Hubo un necio, seguramente envalentonado por las drogas, que fue amablemente ingresado al interior de la camioneta para negociar con él de manera respetuosa y pedirle que regresara a su hogar, con sus padres y fuera un buen hijo. Mentira que lo hayan golpeado, los Puercops no son violentos. Prefieren la negociación, el debate y la clara exposición de las ideas. Ellos escuchan y entienden el sentir de la población.

Caso B.
Una persona caminaba de noche hacia su hogar. Gran irresponsabilidad de su parte pues, a pesar de los esfuerzos del grupo de élite de Puercops, sigue habiendo delincuencia. Un joven caminando de noche es un blanco fácil para los malandrines.

Con gran amabilidad, los Puercops le marcan el alto y le piden revisar su mochila para asegurarse que sus objetos valiosos estén bien guardados. Delicadamente lo llevan a su unidad y le imparten una pequeña pero valiosa capacitación sobre cómo y dónde guardar valores para evitar un asalto.

Lo colocan de espalda y abren sus piernas, con el fin de mostrar mejor los escondites. Es importante que no tenga miedo, por eso tocan sus testículos y aseguran su virilidad y hombría. Una persona cobarde es más propensa a los asaltos.

Después de esta capacitación, dejan ir a la persona y esta continua su camino con mayor tranquilidad, pues tiene la certeza que los Puercops están trabajando por su seguridad y la de su familia.

Como hemos visto, los Puercops representan un gran avance para nuestra sociedad corrupta. Yo mismo he experimentado la tranquilidad de verlos en acción. Me encontraba caminando un sábado por la mañana, me habían mandado a comprar el desayuno. Mi primer error fue cruzar enfrente de una patrulla de Puercops, esto es una clara ofensa, pues ellos, como autoridad, tienen la preferencia antes que el peatón. 

Con su fino olfato de Puercop, el agente me siguió una cuadra adelante y me ordenó detener mi marcha. Sabía que mi imagen no correspondía a la de "Gente de Bien". Fui un tonto al salir con sudadera en una calurosa mañana y usar su gorro en un día soleado.

Las perspicacia del Puercop me señaló como un delincuente ¡y realmente lo era! Le doy la razón pues ninguna gente de bien pasa sin saludar al oficial que vela por nuestra seguridad. En mi defensa quisiera argumentar que estaba distraído escuchando música con mis audífonos, pero eso tampoco es cortés con los oficiales.

El Puercop bajó de su unidad y amablemente me invitó a entrar en ella. Todo siempre bajo un gran respeto hacia mi persona y mi inteligencia. Me ofreció tomar asiento y cerró la puerta por mi. Dentro de la patrulla iniciamos una amena conversación sobre mis actividades matutinas. Falto poco para que me invitara un café y el desayuno completo.

No duró mucho la conversación, apenas unas vueltas por la colonia. Encontramos un grupo de vecinos, el oficial hizo unas preguntas y luego me pidió bajara de la unidad. Fue un paseo maravilloso que me hizo comprender la importancia de mi imagen y arreglo personal. También aprendí el gran aprecio que como sociedad debemos darle a este grupo que día y noche trabaja por y para nuestra seguridad.

Muchas felicidades por su enorme esfuerzo, gran trabajo, calidad humana, honestidad y dedicación.

1 comentario:

tunetworker dijo...

De donde eres? de Marte? xD

Saludos gente!